Las lunaciones y eclipses también son un tipo especial de
tránsito. Son importantes catalizadores,
activando los aspectos de cualquier planeta, natal, en tránsito o progresión,
con el que hagan contacto con un orbe de 2º.
En realidad están combinando la fuerza catalizadora del Sol
y de la Luna. En Luna Nueva, el Sol y la
Luna se encuentran en conjunción, y aúnan sus fuerzas para impulsar cualquier
punto de la carta que toquen. En Luna
Llena, el Sol y la Luna se encuentran en oposición, haciendo lo mismo, pero
cada uno en una dirección y con una influencia distinta.
Las lunaciones tienen menos fuerza que los eclipses,
produciéndose todos los meses, y haciendo referencia a pequeños sucesos o
acontecimientos de la vida ordinaria.
Los eclipses son más escasos, produciéndose tres o cuatro a lo largo del
año, e influyendo en acontecimientos más importantes del mismo. Aún así, tanto unos como otros no tienen la
misma importancia en todas las personas, siendo tan sólo influyentes si tocan
algún punto de la carta con un orbe reducido, y muy influyentes si el aspecto
que hacen es de conjunción.
El ciclo de las lunaciones hay que estudiarlo
como un continuo, iniciándose en Luna Nueva y acabando en Luna Balsámica, pero
siendo sus puntos culminantes la Luna Nueva y la Luna Llena.
La conjunción de la Luna Nueva con algún punto de la
carta parece que despierta esa energía y que algo relacionado con ello comienza
a producirse. Es un momento en que algo
se comienza a engendrar, se toman decisiones y nos ponemos en marcha.
La conjunción del Sol o la Luna en Luna Llena con
algún punto de la carta implica que el otro está en oposición, con los que
entran en juego dos signos y dos sectores que tenemos que intentar integrar. Lo que se comenzó en Luna Nueva tiene ahora su
manifestación, entrando en juego también la casa opuesta.
Los eclipses siempre tuvieron indicaciones
nefastas en astrología, asociándose las mismas con el bloqueo de la luz
transmitida por las luminarias a la Tierra.
Se producen cuando la Luna hace conjunción con su propio nodo. El eclipse solar se produce en Luna Nueva, y
es seguido por un eclipse lunar en Luna Llena 14 días después.
Parecen indicar la necesidad de ajustes y reflexión en
ciertos momentos del año, como si algo bloqueara nuestro funcionamiento normal
y nos impidiera seguir con nuestro ritmo.
Si toca algún punto de la carta este se verá muy afectado, al igual que
la casa en la que cae.
Los eclipses de Sol afectan a la vitalidad, la vida
consciente, la energía y la acción, pudiendo encarnarse en una pequeña
enfermedad como una gripe...
Los eclipses de Luna influyen en las emociones, el estado de
ánimo, el inconsciente, el sueño..., pudiendo encarnarse en momentos de
“bajón”.
En ambos casos hay que hacer una limpieza o una cura
para poder seguir adelante, librándonos de actitudes, conductas o actividades
que no nos favorecen. Para ello tenemos
el período de 1 año en el caso de los eclipses solares y de 4 meses en el caso
de los lunares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario